Cincohierros escribió:Enhorabuena Jose, las motos de la familia tienen doble valor!!
No hace mucho me trajeron al taller una Brio para ponerla un poco al dia.
Cuando ya estaba en condiciones de andar me tome la libertad de pedirle permiso al dueño para meterla en un furgon y llevarla al pueblo.
La deje en marcha en la puerta de la casa de mi padre, llame al timbre y me escondi... y él, que ya va viendo poco y que tiene el hombre 86 años desde la ventana del primer piso se le oyó decir: coño! una brio!!
Su cara describia lo que se siente al tener delante la moto de su juventud, casi 60 años despues.
Bonita anécdota....gracias por compartirla